Hoy me siento sólo
infinitamente sólo.
Hoy no tengo nada que celebrar.
Acabo de romper
con un romance imposible
y el ardor
quema y estremece mi alma.
Hoy no habrá vinos ni alegrías:
La melancolía está cerca
y ronda
como coyote.
Podría decirse
que mi corazón está de luto
pero me era necesario renunciar
para no sufrir sólo y triste
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