jueves, 7 de febrero de 2013

Amistad

Pequeña de ojos oscuros:
te persigo tan sólo por una amistad lúdica
que sólo quiere hacer juegos y cantos.
No me malinterpretes:
las hojas en el aire no lo hacen.
Yo sólo quiero saber de ti y de lo que callas,
de aquello que te nace lejano y evitas
de lo que es lúgubre para tu garganta de claveles.
Yo sólo quiero saber de ti, más nada.
Nadie nace del puño de los aires sin traer un pasado.
Quiero que me digas
qué dolor te tomó desprevenida
y si alguna vez alguien partió tu alma.Dime
qué desesperanza te hizo dejar tu trono de princesa .
Yo he sabido que existías
desde los arquetipos de los presentimientos:
presagié tu sonrisa antes de que nacieras.
Por ti los árboles secos se llenaron de lumbre
y el mar volvió a trazar las rutas del oleaje.
Princesa rosada
principal mujer blanca que se acercó a mis formas.
Tu tamaño
tu imagen
fue predestinación mía.
Idea de mi idea.
Casi me tocó construir con las manosuna cabaña de mariposas que vistieran tu cuerpo.
Te alzaste como crisálida una tarde mayear.
Puse un collar de conchas marinas en tu pecho de malva iridiscente
para que se cimbraran en la música de tus largos movimientos
y conocer entonces si ibas o venías.
Pero nada recuerdas hoy de esto:
te hice beber olvido
y puse un mar entre nosotros.
Más la nostalgia vino y me enterró sus lánzas de relámpago.
No lo sabes,
pero tus manos blancas más de una vez pasaron
muy cerca de mi cuello.
Ahora te busco y quizá creas que te persigo
pero vengo bogando en mi nave de amistades
buscando la forma y la manera
de volver a tenderme junto a tu cuerpo místico
y demoler las ingrávidas fortalezas de estas mis soledades
tan sólo conversando.

No hay comentarios:

Publicar un comentario