aire que es tiempo,
tiempo que cae cristalizado en las arenas
como cascadas de color y mármol.
Al fondo mismo donde nace el arrebol
y se incrustan espigas en las gemas,
tú y tus privilegios de sonidos
mirando al mar con vista adelgazada.
La presencia del mar, arriba, divagando
queriendo verse llena de privilegios.
Océanos de ecos donde muere el peñasco
y los estruendos se revuelcan con la ola
un pensamiento espía y ya te palpa
mientras los elementos te claman con amores
La sirena, deja su canto y se aproxima a verte
para copiar de ti tus gestos y gemidos...
No hay comentarios:
Publicar un comentario